miércoles, 29 de agosto de 2007

Sueños

Muchas veces recuerdo los sueños que venían a mí en la infancia, en la adolescencia. Mi vida estaba repleta de sueños; todo lo que hacía, lo que jugaba, lo que leía, la forma en que me movía, en que me miraba en el espejo. Todo eran sueños. Sueños de amor, de libertad, de amistad, de belleza, de sabiduría, sueños para mí y sueños para aquellos que me rodeaban. Pensaba en el futuro, y todo estaba envuelto en un aura de sueños. Y contra más alejados estuvieran de la realidad, más completa me hacían sentir.

Y llegó un momento en que aquellos sueños pudieron más que mi realidad. En que creí tanto en ellos, aún sabiendo que sólo existirían dentro de mí, que simplemente lo que hice fue encerrarme en el hueco que había hecho para ellos en algún lugar de mi interior, y intentar olvidar todo lo de fuera. La adolescencia... cuántos ideales, cuanta fuerza pueden llegar a tener esos sueños. Tanta, que son ellos los que te hacen despertarte cada día... porque en esa época todo lo demás parece carecer de importancia... y así pasó el tiempo...

Hasta que un día comprendí que todo a mi alrededor continuaba avanzando. Que todo se movía, pero yo me mantenía quieta. Y una mano salió de mi interior y intentó asirse a algo... pero no había nada, fui yo la que lo había echado. Así que fui yo sola la que tuvo que resurgir de aquello que quedaba de mí, porque así es como realmente te demuestras a ti mismo si vales o no. Alzando la cabeza y aferrándote a lo que sea para seguir hacia delante.

Y decidí vivir la realidad. Pero en secreto, susurré a mi cuerpo que seguiría creyendo en aquellos sueños. Que comprendía que eran fantasiosos, pero que eran míos, eran mis sueños. Y con tinta hice un pequeño giño a mi piel, recordándome siempre quien soy.

Pero de eso ha pasado ya mucho tiempo. Y hoy he recordado esto... porque a veces, alguno de aquellos sueños se hacen realidad. Porque en algún momento te sientes completa contigo misma, te sientes llena.

Y es entonces cuando me encanta mirar hacia atrás y decirle a aquella niña: Yo sigo hacia adelante... gracias por hacerme así

:D


domingo, 26 de agosto de 2007

Welcome home

¡Pues aquí estamos! Hasta ahora tenía un par de páginas, cada una para una cosa...por ahí perdidas. Pero bueno, ya estamos aquí. A partir de ahora podré ir actualizando, y como tengo los vínculos aquí mismo, poes más fácil todo.

Ahora me pondré a toquetear botones del sitio este, a ver qué saco en claro.

Domingo de Fiesta Mayor... qué sueño... si no fuera porque els trabucaires de Ripollet se pasean a las once de la mañana, estaría ahora tranquilita soñando en la cama... y no existiría este Blog... la vida está hecha de casualidades.

Incluso el hecho de que estés ahora mismo (tú, si, tú) leyendo esto, se debe a un sinnúmero de casualidades que te han llevado a este momento. A esta hora, en este sitio, en estas letras. El momento en que nos conocimos, las veces que hemos hablado, el estado de ánimo que tienes ahora mismo en el cuerpo, las ganas de cotillear...

Hasta la próxima.

P.D. En la galería de imágenes voy poniendo las fotos de la Fiesta Mayor :D